La gesti�n de la transici�n econ�mica en China

Título

La gesti�n de la transici�n econ�mica en China

Autor

Chang Yong Rhee : Director del Departamento de Asia y el Pac�fico del Fondo Monetario Internacional (FMI).

Fecha

05/10/2015

Fuente

Blog oficial del FMI: Diálogo a fondo
http://blog-dialogoafondo.imf.org/?p=5966

Descripción

Tras 35 a�os de fuerte crecimiento econ�mico chino basado principalmente en exportaciones, Chang Yong Rhee nos explica que la direcci�n econ�mica del pa�s asi�tico comienza a tornarse hacia el consumo interno y el sector servicios.

Enlace secundario

En los �ltimos meses, todo el mundo, tanto los mercados financieros de las econom�as avanzadas como los productores de materias primas de pa�ses en desarrollo, ha seguido de cerca la evoluci�n de China. Tras 35 a�os de crecimiento extraordinariamente r�pido, la econom�a china atraviesa un per�odo de importante transici�n. Del crecimiento liderado por las exportaciones est� pasando a un modelo impulsado cada vez m�s por el consumo y los servicios, menos centrado en la inversi�n p�blica financiada a base de endeudamiento.
Dicho proceso ha ido acompa�ado de una desaceleraci�n de las importaciones y volatilidad en el mercado financiero, lo cual ha planteado inquietud en torno a sus repercusiones sobre la econom�a mundial, en especial sobre los efectos de contagio en los pa�ses m�s beneficiados por el r�pido crecimiento de China.
No obstante, es importante entender que la transici�n es esencial para que China pueda crear una econom�a m�s inclusiva, que ofrezca mayores posibilidades a las fuerzas del mercado y alcance un crecimiento m�s seguro y sostenible. Para conseguirlo, el gobierno chino deber� hacer sutiles malabarismos para aplicar reformas y mantener a la vez la demanda y la estabilidad financiera. A medida que vayan desarroll�ndose las reformas, ser� fundamental garantizar la gobernanza eficaz de los mercados y empresas reci�n liberalizados. Ello comportar�, en particular, un endurecimiento de las limitaciones presupuestarias de las empresas tanto p�blicas como privadas, as� como el fortalecimiento continuado del marco de supervisi�n financiera.
Por el momento, la evoluci�n de la econom�a real es reconfortante y hace pensar que es posible gestionar la transici�n. El actual ritmo de desaceleraci�n de China se mantiene acorde con las previsiones del FMI (y las de las propias autoridades), si bien han aumentado los riesgos a la baja. Se basan en la solidez de la inversi�n en infraestructuras y el consumo �en especial de servicios�, aunque la actividad se haya debilitado claramente en los sectores manufacturero y de la construcci�n.
China dispone de un margen adecuado para la aplicaci�n de pol�ticas en caso de que fuese necesario incrementar todav�a m�s las pol�ticas de est�mulo para evitar una ca�da excesiva del crecimiento. Estas medidas deber�an centrarse en la demanda y el reequilibrio (por ejemplo, mediante el respaldo al consumo, en especial de los miembros m�s vulnerables de la sociedad china).
En cambio, ser�a preferible evitar el uso renovado de la inversi�n financiada a base de endeudamiento, para evitar el resurgimiento del apalancamiento empresarial. En China, desde la crisis financiera mundial, el crecimiento se ha basado sobre todo en la inversi�n y el cr�dito. Las empresas p�blicas, los sectores inmobiliario y de la construcci�n, y las empresas m�s d�biles son los que han acumulado un mayor apalancamiento, lo que ha dado lugar a un n�mero cada vez mayor de vulnerabilidades. Si bien todav�a son razonables, no pueden seguir acumul�ndose.
Los peligros de un apalancamiento excesivo se han hecho evidentes en la bolsa. Impulsados por un fuerte crecimiento del cr�dito, que se ha desacelerado desde entonces, los mercados de valores subieron m�s del 100% entre noviembre de 2004 y el pasado mes de junio, y no ha sido hasta los �ltimos meses que han registrado una correcci�n del 40%. Probablemente, esta correcci�n era necesaria, pero tuvo efectos de contagio mundiales significativos. Afortunadamente, se espera que tenga repercusiones directas limitadas sobre la econom�a, dado el bajo grado de participaci�n accionarial de los hogares chinos y la reducida proporci�n de participaciones en el financiamiento de las empresas.
El reciente cambio de r�gimen cambiario tambi�n tuvo un importante efecto domin�, especialmente en Asia, debido a la incertidumbre generada por dicha variaci�n. No obstante, el cambio de r�gimen cambiario es acorde con la intenci�n de las autoridades de adoptar un tipo de cambio dictado en mayor medida por los mercados. Asimismo, tras la significativa apreciaci�n real del a�o pasado, desde el cambio el renminbi solo se ha depreciado en torno al 3%, lo que no modifica la valoraci�n del FMI de que el tipo de cambio es en general acorde con los fundamentos econ�micos a mediano plazo.
Si bien la econom�a china se desacelera seg�n lo previsto, el tama�o y la integraci�n del pa�s en la econom�a mundial implican que sus resultados afectan a quienes lo rodean. Estimamos que una desaceleraci�n del crecimiento chino de un punto porcentual se traduce en una disminuci�n de 0,3 puntos porcentuales en otros pa�ses asi�ticos. Estos efectos de contagio son por supuesto preocupantes, y las �ltimas experiencias indican que los efectos de contagio sobre los vecinos asi�ticos de China puede que hayan aumentado todav�a m�s en los �ltimos tiempos, como consecuencia no solo del comercio, sino tambi�n de los v�nculos entre los mercados financieros mundiales.
Dichos efectos de contagio se han visto intensificados por fuerzas que van m�s all� de la frontera china, como la ca�da de los precios de las materias primas y las perspectivas de aumento de las tasas de inter�s en Estados Unidos, lo que podr�a generar una presi�n a la baja sobre los vecinos asi�ticos.
En resumen, la consigna debe seguir siendo la vigilancia. En el caso de China, esto significa centrarse en los riesgos a la baja; en el resto del mundo, protegerse de los posibles efectos de contagio. De gestionarse bien �con una comunicaci�n m�s clara que sirva de orientaci�n para las expectativas del mercado�, la transici�n de China podr�a sentar las bases de una renovada solidez econ�mica en una regi�n que ha liderado el crecimiento mundial durante a�os.

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Citación

Chang Yong Rhee : Director del Departamento de Asia y el Pac�fico del Fondo Monetario Internacional (FMI). , “La gesti�n de la transici�n econ�mica en China,” Repositorio HISREDUC, consulta 25 de diciembre de 2025, https://www.repositorio.historiarecienteenlaeducacion.com/items/show/4149.